1. Aprender a mirar

Hace un par de años, después de mucho ver y admirar lo que otros son capaces de hacer, me decidí por fin a intentar llenar el espacio de un papel en blanco. Tarea y placer por momentos, de seguro la oportunidad de abstraerse del mundo que nos rodea y adentrarse en uno propio. Pero, ese mundo no existe más que en sueños y lo tienes que construir tú mismo. Aunque partes de la nada, al empezar se aprende y plagia, se observa y copia, a veces parece tuyo y las más sólo es un reflejo de algo previamente visto. Parece un imposible encontrar tu propio camino, eso es lo que trato y de lo que precisamente trata este espacio, de esa búsqueda y del afán por compartirla con los amigos...

África - carboncillo 2010

Al principio con el carbón, más que los colores lo que se mezclan son la frustración y la ilusión a partes iguales, desconoces todo lo que no sabes y cuando te aventuras pides ayuda. La técnica es muy útil pero te ata, puras matemáticas me parecen a mí: proporciones, escalas de grises y luces…
A veces, los resultados parecen alentarte a seguir, quizás en mi ignorancia veo lo que no hay. En todo caso es tuyo, o no del todo, una mala copia de la realidad.

 

Mis ojos están aprendiendo a mirar y la mano sigue torpe el dictado de sus órdenes, pero si he de ser sincero, no creo que sea exactamente ésto lo que me ha traído aquí. Alguien me dice que son pasos obligados, debo armarme de paciencia...

Autorretrato de África - 6 años

Afortunadamente algunos parece que nacieran sabiendo ya, la peque me acompaña en el camino con gran despliegue de imaginación y pericia.